Cristina Kirchner regresa a Santiago del Estero en el Día del Militante, en un acto que la reunirá con sus fieles y con el gobernador Gerardo Zamora. Con la expectativa puesta en el fallo de Casación sobre su condena por corrupción en la causa Vialidad, la expresidenta busca ratificar su liderazgo en una de las provincias donde el apoyo peronista sigue intacto a pesar de los escándalos.
Este miércoles, mientras el peronismo aún hace sus números en Santiago del Estero, la Cámara Federal de Casación Penal emitirá un fallo crucial en la causa Vialidad, donde la expresidenta Cristina Kirchner ya ha sido condenada en primera instancia. Y en un giro que combina retórica, política y el conocido afecto santiagueño por el peronismo, Gerardo Zamora, el gobernador de una de las provincias más pobres de la Argentina, será el anfitrión de Cristina para el Día del Militante. ¿Quién mejor que Santiago del Estero para ser el escenario de esta jornada de “militancia”? Un lugar que, con un peronismo que allí parece inquebrantable, ha resistido cualquier esperanza de desarrollo proporcional a su lealtad partidaria.
El acto se llevará a cabo en la Asociación Atlética Quimsa, un club de básquet local que, sin duda, verá desfilar a una multitud de fieles a la espera de la palabra de su líder. Cristina no solo se pronunciará sobre el fallo judicial en su contra, sino que además habrá una asunción simbólica como presidenta del PJ nacional. Y, con un poco de suerte, los santiagueños podrán escuchar su versión sobre la obra pública en Santa Cruz, un tema que ya acumula unas 1500 páginas de resoluciones judiciales, aunque puede que los jueces omitan los detalles para mantener el evento breve.
El evento del Día del Militante, además de la esperada arenga de Cristina Kirchner, servirá para proyectar la imagen de unidad en torno al peronismo en Santiago del Estero. Esta visita resulta particularmente simbólica, ya que se da justo en el contexto de un fallo clave en la causa Vialidad, donde los jueces decidirán si la condena de seis años e inhabilitación perpetua de la expresidenta será ratificada o incluso ampliada. Sin embargo, este tipo de acto “popular” en una provincia que lucha con altos índices de pobreza solo subraya la ironía: Santiago del Estero, un bastión peronista, sigue siendo uno de los lugares más marginados y rezagados del país.
La Sala IV de la Cámara se prepara para emitir el fallo tras un arduo proceso de revisión, en el que se sopesan las acusaciones de corrupción ligadas a la obra pública en Santa Cruz, por las que Cristina y otros exfuncionarios ya enfrentan varias causas. Este acto en Quimsa, más que una simple celebración, parece diseñado para consolidar la narrativa de victimización que el kirchnerismo ha cultivado en torno a los embates judiciales. Todo esto ocurre mientras la justicia sigue investigando una red de corrupción que, según los fiscales, drenó fondos públicos. Para los críticos, este evento es el símbolo perfecto de cómo el peronismo apela a sus bases incluso en momentos de crisis, en lugar de rendir cuentas.
Anónimo
Chorra sinvergüenza. La justicia divina siempre llega