Zamora decide: Nuevo golpe al bolsillo con aumento del boleto en Santiago y La Banda

Aumento del boleto y un servicio que va en retroceso: Santiago del Estero se lava las manos y culpabiliza a la Nación

Como cada temporada, en Santiago del Estero se estrena un nuevo capítulo de la serie “Que Suba el Boleto, Pero Que Parezca Que No Fue Culpa Nuestra”. El guion ya es conocido: primero, el gobierno provincial, con la cara bien seria, invita a los transportistas a presentar un pedido de aumento bien inflado; luego, el municipio monta su drama habitual de «¡La Nación nos ha dejado desamparados!», y finalmente, en una maniobra digna de héroes de cine, los concejales del Frente Cívico aprueban un aumento un poquito menor al solicitado, como para aparentar que piensan en el usuario. Y claro, los santiagueños aplauden… pero de la bronca.

Este jueves, minutos antes del mediodía, los empresarios del transporte público de Santiago del Estero agregaron el siguiente acto a la obra: presentaron un proyecto para elevar el boleto de colectivos a $1.060. Como de costumbre, la propuesta fue enviada al Honorable Concejo Deliberante de la Capital, donde el lunes próximo serán recibidos por el presidente del organismo, Humberto Santillán. La escena promete tensión y declaraciones ensayadas, aunque el final ya parece escrito.

¿El resultado? Otro golpe al bolsillo, con un boleto que podría llegar a los $1,000, mientras el servicio de transporte va en picada, en un nivel que algunos comparan ya con un safari urbano. Con suerte, los colectivos pasan; y cuando pasan, mejor rezar para que tengan ventanillas, no se detengan a mitad de camino, o simplemente… no lleguen más llenos que un tren de ganado. Pero para los empresarios, todo sigue de maravilla. En cada audiencia, aprovechan la ocasión para lanzar frases como «el mejor gobernador que hemos tenido» y pedir más subsidios. Y de mejorar el servicio… ¡ni hablar!

 

Por si fuera poco, mientras los santiagueños ven cómo el precio del boleto sube y el servicio sigue empeorando, la intendenta de la Capital brilla por su ausencia. ¿Será que no usa colectivo? Ni una palabra sobre el estado del transporte, como si esto no fuera con ella. Pero claro, el usuario no necesita explicaciones, ¿verdad? Seguramente ya se adaptó a la aventura diaria de «¿me llevarán hoy o no?».

Así, Santiago del Estero sigue innovando en la ciencia del «cómo hacer parecer que la culpa es de otro». Con los precios disparados, la falta de inversión y el riesgo de perder cientos de empleos en el sector, al menos los santiagueños pueden estar seguros de una cosa: el próximo aumento ya tiene fecha, y la fórmula para aprobarlo, como siempre, ya está escrita.

.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *